Crecen las quejas de varios neoyorquinos por la cantidad de fuegos artificiales que se han estado lanzando en las noches. 

Para algunos, los fuegos artificiales sirven como liberación después de meses de cuarentena.

Para otros, son una celebración de los avances logrados durante las protestas contra la injusticia racial.

Pero no todos están muy contentos con la pirotecnia nocturna.

En la primera quincena de junio, más de 1,700 quejas sobre fuegos artificiales llegaron al sistema 311 de la ciudad, 80 veces más que en el mismo período del año pasado.

Flatbush en Brooklyn ha visto la mayoría de las quejas por el ruido después de la media noche. 

La policía de Nueva York dice que ha hecho 26 incautaciones de fuegos artificiales, 8 arrestos, y emitió 22 citaciones relacionadas con los fuegos artificiales en lo que va del año.

También ha habido casi 6,000 llamadas al 911 relacionadas con fuegos artificiales. 

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